Este ha sido nuestro itinerario:
Día 1 (sábado 10): VITORIA - MADRID – AMMÁN
¡Qué nervios! ¿Llevamos todo?
Todas estamos muy emocionadas con los planes del viaje, así que la ida a MADRID desde VITORIA en coche de alquiler y el vuelo MADRID – AMMÁN no se nos hizo nada duro.
Donde dormir en Ammán:
Hotel Toledo (junto a la Estación de Autobuses de Abdali - 70 JOD la habitación doble).
En el Aeropuerto se puede coger por un par de JOD el Autobús Airport Express, que deja en la Estación Abdali. La otra alternativa, mucho más cómoda y la que nosotras elegimos, es la de gestionar la recogida con el hotel (unos 30 JOD).
Nota:
1 JOD (dinar jordano) = 100 piastras = 1.000 fils
Día 2 (domingo 11): AMMÁN - JERASH – Frontera King Hussein Bridge – Frontera Allenby – JERUSALÉN
Algunas dormimos mejor que otras para enfrentar nuestro primer día en el país, pero todas nos introducimos en la ciudad de Ammán con muchísima ilusión.
Seguro que la ciudad tiene su encanto. Sin embargo, nosotras, tras unas cuantas vueltas por el centro y una breve visita a la Ciudadela, no se lo encontramos, así que decidimos seguir con nuestros planes de viaje.
Negociamos con un taxista de la calle que nos llevara a la antigua ciudad romana de Jerash, nos esperara allí un par de horas y luego nos trasladara al paso de fronteras para iniciar nuestro periplo por Cisjordania (40 JOD).
Qué ver en Jerash:
A las 12h y a las 14h se celebra una especie de teatrillo en el Hipódromo con gladiadores, cuadrigas, etc… Nosotras llegamos justo a tiempo para ver el final. ¡El espectáculo fue un tanto artificial, pero divertido!
Cómo pasar la frontera de Jordania a Israel:
• Contar con mínimo 3 horas.
• No confundir el paso del Rey Hussein con el paso del Jeque Hussein. Éste último está más al norte y debe ofrecer más dificultades.
En el paso del Puente del Rey Hussein nos sellaron el pasaporte, pagamos las tasas de salida del país (10 JOD) y esperamos a un autobús (4 JOD/pax incluido 1 equipaje) que nos llevó al paso israelita de Allenby.
En el paso de Allenby tuvimos que entregar la mochila junto con nuestro pasaporte, nos devolvieron el pasaporte, pasamos unos cuantos controles donde nos sellaron la entrada al país e incluso nos sacaron una foto y finalmente pudimos recoger nuestro equipaje, que aguardaba tirado en el suelo.
Una vez localizadas y recogidas nuestras mochilas, un argentino que parecía trabajar en la seguridad del lugar, nos indicó donde cambiar dinero y donde comprar los billetes para el taxi-colectivo (sherut) que nos llevaría a la Puerta de Damasco en el centro de Jerusalén.
Anécdota del día:
¡Fue toda una suerte encontrar nuestro hotel en Jerusalén a los 5 minutos de habernos bajado del ‘sherut’, porque ninguna de nosotras había impreso la dirección del hotel y ninguna sabía exactamente donde estaba! ¡Qué despiste! Y… ¡vaya suerte!
Donde dormir en Jerusalén:
New Palm Hostel (Económico y céntrico. Las habitaciones son muy pequeñas, pero hay un ‘lounge’ común estupendo donde se puede descansar, tomar té y conocer a otros viajeros).
Día 3 (lunes 12): JERUSALÉN
Como sólo teníamos un baño para las cuatro, decidimos madrugar para prepararnos lo antes posible y poder así disponer de más horas de sol para descubrir todos los rincones de Jerusalén. Nos esperaba un día intenso en una ciudad llena de historia y, seguro, de historias.
Qué visitar en Jerusalén:
La oficina de turismo de la Puerta de Jaffa ofrece varios walking tours en inglés (www.newjerusalemtours.com). El gratuito es bastante interesante e incluye todos los puntos de interés de la Ciudad Vieja. Aquí los que nosotras visitamos:
• La zona centro de la Ciudad Nueva es la zona moderna. Sus calles peatonales están llenas de tiendas y cafés. Cerca se encuentran la Catedral Rusa y la Calle Etiopía, a través de la cual (hacía el norte) se llega al Barrio Judío Mea She’arim. Este es un barrio-gueto donde viven los judíos ultra ortodoxo. Su estricta interpretación de la Ley Judía hace que la actitud de sus vecinos hacia los visitantes pueda ser poco amistosa. Se entiende que si uno desea internarse en sus calles, éste debe adaptarse a sus peculiares normas, bien indicadas a través de carteles en todas las entradas al barrio. Nosotras nos conformamos con ver el barrio desde la frontera, porque no cumplíamos la norma de llevar falda larga y no quisimos herir sensibilidades con nuestros pantalones largos.
• La Ciudad Vieja, declarada Patrimonio de la Humanidad en 1981, es realmente una maravilla. Esta zona, completamente amurallada, se divide en cuatro barrios: el Musulmán (con la Explanada de las Mezquitas, donde se alza la emblemática Cúpula de la Roca), el Cristiano (donde está la Iglesia del Santo Sepulcro y la Vía Dolorosa o Vía Crucis), el Judío (donde se encuentra el Muro Oeste o Muro de las Lamentaciones) y el Armenio. Os recomendamos un paseo sin prisas por sus callejuelas para poder disfrutar de los bazares y del día a día de la city.
• Al este de la ciudad vieja, se encuentra el Monte de los Olivos. La mejor excusa para subir hasta su cima es la maravillosa vista panorámica de la ciudad, sobre la que tantas veces hemos visto a los corresponsales del Teleberri.
Anécdota del día:Fuimos tan torpes que ninguna de las cuatro nos dimos cuenta de que había 1 hora de diferencia horaria entre Jordania e Israel, así que cuando, según nuestro reloj, a las 11 de la mañana estábamos esperando a que empezará nuestro FREE TOUR por la city y no llegó nadie, nos quedamos de lo más tiradas… ¡Hasta que nos dimos cuenta de que habíamos llegado con una hora de antelación! Sí, ya lo sabemos, ¡fue una estupidez madrugar tanto!
Un consejo:
Evitar la visita el viernes (día festivo de los judíos).
Día 4 (martes 13): JERUSALÉN – BELÉN - Frontera Allenby – Frontera King Hussein Bridge – MAR MUERTO
Otra vez negociamos con un taxista nuestro plan de viaje. Esta vez nos llevaría a Belén, esperaría por nosotras una hora y después nos llevaría al paso de fronteras. Como los taxistas son, por norma general, buenos hombres de negocios, a nuestra llegada a Belén, ya teníamos un guía preparado para ofrecernos una hora de tour exprés, que por comodidad no rechazamos.
No sabemos muy bien que fue lo que nos hizo estar tan cómodas en el taxi de Samer (el taxista de Ammán), porque el coche era más bien un trasto, pero… él nos inspiraba confianza, así que le llamamos desde el paso Allenby para que nos recogiera a nuestra llegada al paso fronterizo jordano. Los trámites de vuelta en la frontera fueron mucho más ágiles que a la ida y tampoco tuvimos complicaciones.
Aunque Samer nos recogió puntual, no llegamos a tiempo para entrar al Parque de Betania más allá del Jordán. Era Nerea quien tenía especial ilusión por ver el río Jordan, pero el “disgusto” se le pasó enseguida porque aprovechamos la tarde disfrutando como niñas en el Mar Muerto, concretamente en la famosa Amman Beach. Se nos olvidó comprar un periódico para haber sacado la típica foto, pero bueno, tampoco están mal, no?
Anécdota del día:
¡Samer se vistió de domingo para ir a recogernos!
Donde dormir en el Mar Muerto:
Dead Sea Spa (¡Ojo! A las 18h tanto la piscina como el spa están cerrados).
Día 5 (miércoles 14): MAR MUERTO – Carretera del Rey – Cañón WADI MUJIB (Dhiban) – Castillo KARAK – PETRA (Wadi Musa)
El día anterior quedamos nuevamente con Samer para que nos viniera a recoger y nos llevara a Petra a través de la carretera del Rey, parando en el mirador del Cañon Wadi Mujib y en el castillo de Karak. En principio nos hubiera gustado insertarnos en el Parque Natural de Wadi Mujib y haber hecho alguna excursión acuática, pero ni la carretera del Mar Muerto (entrada al parque) ni la del Rey son autopistas y tuvimos que renunciar a esta idea simplemente por una cuestión de tiempo.
Samer llegó una hora más tarde de lo acordado. ¡Había ido a la peluquería y a la barbería!
Otro golpe de suerte:
La excursión PETRA BY NICHT sólo se hace tres veces por semana: los lunes, los jueves y los viernes a las 20:30h. Justo llegamos el día adecuado y a tiempo para comprar la entrada, descansar un poco, ducharnos y salir a cenar antes de descubrir de noche una de las 7 maravillas del mundo.
Donde dormir en Wadi Musa:
Nosotras nos quedamos en Shara Mountains Hostel.
El Hotel Cleopatra también tenía buena pinta.
Donde dormir cerca de la entrada a Petra: Petra Moon Hotel.
Día 6 (jueves 15): PETRA
Éste prometía ser un gran día y no nos decepcionó. Volvimos a madrugar para poder cruzar el SIG a primera hora sin la aglomeración de turistas de la noche anterior y… ¡Guau! ¡Qué pasada!
Es un recorrido increíble, para el que mejor dejamos que las imágenes hablen por si solas…
Por la mañana estuvimos paseando/escalando por la ciudad perdida (algunas más que otras) y fue por la tarde cuando nos decidimos a subir al Monasterio. Se puede subir en burro o caballo, pero preferimos la opción más económica porque confiábamos más en nuestras piernas. ¡Las vistas desde arriba al Desierto de Aqaba son increíbles! Además el té que nos tomamos en una “jaima” al píe de un mirador nos sentó fenomenal.
La anécdota del día:
Ya estábamos de retirada, cuando se nos acercó un guapo beduino en camello. ¡Qué curioso, les encantan los catalanes! Bueno, y según nos confesaron más tarde, les encantan los alemanes, los belgas, los ingleses… todo depende de donde sea uno. Al del camello, pronto se le unió otro simpático beduino en burro. Y de pronto, allí estábamos, muertas de cansancio, compartiendo un té (al que nos invitaron) con un grupo de beduinos autóctonos. Después del té, llegó la puesta de sol en la cima de una colina, donde continuamos compartiendo experiencias, cánticos, chistes, piropos generales y… sobre todo, risas.
Nos invitaron a ir con ellos a su pueblo Umm Sayhoun, a conocer a sus familias y a organizar una barbacoa… Estábamos cansadas y…, bueno, algo de desconfianza también rondaba en algunos de nuestros cuerpos, así que finalmente llegamos al acuerdo de juntarnos con ellos para cenar en un restaurante de Wadi Musa. Curiosamente cuando llegó la noche los chicos se habían convertido exactamente en cuatro y también curiosamente nos tenían más que repartidas… Continuamos un rato más con las risas y cuando decidirnos irnos, se aseguraron de dejarnos sanas y salvas en el hotel.
Personalmente valoro la experiencia de conocer a estos chicos, como muy interesante y divertida. Sabía que los beduinos eran personas hospitalarias, que aman la naturaleza y sentirse libres, pero nunca me hubiera imaginado que fueran tan abiertos de mente, divertidos y agradables. Para conocer un poco más sobre sus costumbres y forma de vida, os invito a leer la siguiente página (en inglés): www.bedouinpride.com
Día 7 (viernes 16): PETRA (Wadi Musa) – WADI RUM
Para este día ya habíamos contratado desde casa (internet es una maravilla) una excursión por el desierto con el Sunset Camp. Elegimos el tour nº 3 de 6 horas en 4x4 y una hora de trekking.
Teníamos que llegar al pueblo de Rum antes de las 11h de la mañana y el trayecto desde Petra fue de hora y media en taxi, así que llegar a tiempo no nos supuso ningún problema.
A pesar de que no madrugamos en exceso y de que desayunamos tranquilamente, éste fue, sin duda, el día más duro. Subiendo y bajando del 4x4, subiendo y bajando dunas, subiendo y bajando rocas… Todo bajo un sol abrasador. Y bueno, a esto hay que añadir que la organización del tour no fue la mejor: nuestro chofer apenas hablaba una palabra ni en inglés ni en árabe, suprimieron la hora de trekking sin darnos explicaciones y el campamento donde pasamos la noche dejaba bastante que desear (sobre todo los baños…).
¡Sin embargo el paisaje y la puesta de sol merecieron la pena! ¿Qué os parece?
Día 8 (sábado 17): WADI RUM – MONTE NEBO - MADABA
En el pueblo de Rum no hay taxistas, así que un beduino del campamento nos ofreció organizarlo todo para que un taxi nos recogiera en el pueblo a las 8:30 h de la mañana. El precio nos pareció razonable, por eso aceptamos la propuesta sin mucha discusión.
Tardamos más o menos 3 horas en llegar al Monte Nebo por la Carretera del Desierto (esta sí que es una autopista), 15 minutos en ver las vistas de la tierra prometida de Moises y otros 15 minutos en llegar a nuestro hotel con piscina. ¡Qué pena que el agua estuviera helada!
Después del baño dedicamos la tarde a comer algo, ver algunos mosaicos bizantinos, realizar algunas compras y a tomarnos el último té recordando las anécdotas del viaje.
Donde dormir en Madaba:
Hotel Mariam (60 JOD/habitación de cuatro).
Día 9 (domingo 18): MADABA – MADRID - VITORIA
Foto en el aeropuerto con nuestros palestinos, comprados el día anterior, y vuelta a casa.
¡Oh, ooooohhhhh…!
3 comentarios:
Hola chicas!! espero que lo esteis pasando bien pq ya os queda menos pa volver (je,je)
En serio, sacad muchas fotos y disfrutar del viaje
Besitos
¡Qué bonito blog! y ¡Qué bonito viaje! Fueron vacaciones sin descanso(echo de menos en el blog al papito express de la última cena), pero merecieron mucho la pena.Espero que podamos compartir otro viaje de chicas en otra ocasion.
Es verdad, no he contado todas las historietas, pero no quería aburrir.
Por cierto, desde el viaje de Inter-Rail hasta éste sólo han pasado 6 años! Vamos a ver que nos tiene preparado el destino... ¿consequiermos hacer otro viajecito juntas en menos tiempo?
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